Charlestón años 20, frac, collares largos y ropa ligera, sin corsés, libertad de movimientos!
Mas o menos años 30… ¡El tango! desde las tabernas a los salones más exclusivos. Una cosa es segura, para ellas una buena abertura en la falda.
Los 40, guerra y Swing, un baile de origen y gusto mucho mas popular y juvenil, la ropa también.
Si, además del New Look de Christian Dior, en los 50, la música, sobre todo de las big band como la del famoso Xavier Cugat, aportaron su granito de arena a la estética del momento. Mujeres exuberantes y lujo, mucho lujo.
La influencia de la música y el baile en la moda es innegable.
Si, los 60. Esta década dio mucho, mucho de sí, musical y estéticamente hablando, aunque los principios fueron bastante… Twist. Obsérvese cómo la chica ya es cualquier cosa menos exuberante, pero el chaval sigue con su traje chaqueta.
Hasta que, entre otras, llegó ella… Nancy, moderna y sexy.
The Beatles. Aquí la cosa ya iba cuesta abajo y acelerando, ¿cómo si no se explican estas pintas?
Y como no, Rolling Stone, chorreras, rasos, gafas raras… Simpatía por el diablo, que fue quien seguramente hizo el estilismo de esta famosa foto.
Lo cierto, es que, a partir de aquí, la asociación entre moda y música prácticamente fue indisoluble. Ningún grupo musical, pop, rock o lo que fuera, se saltaba el proceso del vestuario, sus apariciones debían seguir o marcar tenencia. La música competía con el cine que antes era el gran difusor de moda y tendencia, más allá de las revistas especializadas, tanto el cine como la música eran capaces de llegar a más gente.
Llegados a los 70, siempre he pensado que Abba tiene un lugar histórico en el siglo XX por ser probablemente el grupo musical con la verstimenta mas estrafalaria, rara, y no se… Lo peor. Esta gente debía de ser muy amante de la navidad, porque nunca dejaron pasar la ocasión de engalanarse cual árbol de navidad, les faltan los espumillones y las bolas… Lo demás ya lo llevan puesto, y menos mal que se han retirado, que con lo del espumillón no quiero dar ideas…
Pero sería injusto no hablar del gran David Bowie. Glam o lo que hiciera falta, el gran duque blanco nos regaló desde sus inicios y hasta su muerte una gran lección de estilo, tendencia y modernidad.
Pero, también la música disco de los setenta nos dio alegrías, y no solo sonoras, las grandes damas de la música Disco, como por ejemplo Donna Summer o Diana Ross, o Evelyn Thomas (musa de la famosa discoteca Studio 54) no solo nos regalaron los oídos. Véase esta magnífica foto de Diana Ross. Podría ser un anuncio de Calvin Klein jeans ¿no os parece?
Pero eran los setenta y grupos como Bonney M, que personalmente me chiflan (musicalmente hablando) aportaron también su particular visión del vestuario para espectáculos solo superado por Abba. Las lentejuelas, los brillos indiscriminados, plumas, cualquier cosa era del agrado de este divertidísimo grupo.
Y llegamos a los 80. Aquí hay mucho, mucho donde elegir. Las tribus urbanas, el Punk, el After punk (casi más importante estéticamente hablado que el mismo punk) A principios de los 80, la música disco, el rock y el punk todavía conviven, y la mezcla de todo esto, además de un ansia casi demente de cambio y modernidad, nos trajo cosas como el Tecno y sus derivados.
Siouxie Sioux, esta gran creadora de música y estética ya estaba “dándolo todo” en Londres, cuando su gran imitadora, Madonna, todavía no era la estrella que llegaría a ser. Pongo estas dos fotos, de mala fe, lo confieso, porque es algo que los incondicionales de Madonna me discuten mucho, pero es lo que hay. Siouxie, desde 1978, Madonna 1982. Bien es cierto que Madonna tuvo un innegable don de la oportunidad que la inglesa jamás tuvo o que ni siquiera le interesó.
Otra de las grandes reivindicaciones estéticas que me gustaría hacer es, entre Adam Ant (poca gente lo recuerda) y la mismísima Vivienne Westwood.
Visage, fade to grey, se llevaba a principios de los 80 mucho lo del arlequín… La de al lado, es Siouxie.
Llegados a este punto, la música sigue la moda, ya no marca prácticamente nada. Cómo se puede apreciar tanto Spandau Ballet como mecano seguían la misma tendencia, un poco rara la verdad, mezclas de pañuelos en cuello, cabeza…
Pero dejemos los ochenta y pasemos a los noventa. EL GRUNGE!!!!
Blur, ya se puede apreciarla diferencia, prendas casual, nada de brillos, nada de “glamour”
Pixies… Where is my mind… Where is the fashion? Llegados al nuevo milenio, volvemos al espectaculo y los brillos, véase por ejemplo a Beyoncé.